1 / 4

Motril: Pato firma un hat-trick para el CF Motril pero la UD San Pedro amarga la tarde al líder en el Escribano Castilla, 3-3

El Estadio Escribano Castilla vivió esta tarde un partido imprevisible, vibrante y de los que dejan huella. Lo que se anunciaba como un trámite para el líder del Grupo IX acabó convertido en un ejercicio de supervivencia: el CF Motril tuvo que sudar cada minuto para rescatar un empate (3–3) ante una UD San Pedro que, pese a navegar en la zona baja de la clasificación, firmó una de sus actuaciones más brillantes del curso.

El arranque fue un monólogo motrileño alimentado por la inspiración descomunal de José Antonio Ruz Rabaldán, “Pato”, que levantó al público de sus asientos con tres goles en la primera mitad. El extremo derecho estuvo intratable, desequilibrante y oportuno, convirtiéndose en la absoluta pesadilla de la zaga malagueña. Con el 3–2 al descanso, el Motril parecía encaminar la tarde hacia una victoria cómoda.

Pero el fútbol, caprichoso, tenía otros planes.

La UD San Pedro, lejos de rendirse, regresó al campo con un espíritu indomable y un plan de partido que desbordó todas las previsiones. El conjunto malagueño, al borde de los puestos de descenso, mostró un nivel impropio de su posición y compitió como uno de los favoritos del grupo. Andrés y Almagro dinamitaron el marcador con dos tantos que dejaron helado al líder y obligaron a recomponer el guion.

Por si fuera poco, en la segunda mitad se le anuló un gol al cuadro sampedreño, que siguió acumulando argumentos para creer en la remontada. Y la fe encontró recompensa: Santi Luque, desde el punto de penalti, firmó el 3–3 y encendió la recta final del encuentro.

El tramo decisivo llegó cargado de tensión. En el minuto 86, el San Pedro quedó en inferioridad tras la expulsión del central Diego Rubio, pero ni siquiera ese golpe frenó su ambición. Los visitantes siguieron buscando el cuarto tanto con valentía, obligando al Motril a un ejercicio defensivo que sostuvo el punto como un tesoro.

El CF Motril, pese a ver escapar una victoria que parecía encarrilada, ofreció una imagen sólida y competitiva, consciente del peso de liderar la tabla una jornada más. El empate, más sufrido de lo previsto, mantiene a los granadinos en lo más alto, mientras que la UD San Pedro se marcha con un botín valioso y una actuación que le reivindica como un equipo muy distinto al que marca la clasificación.

Un duelo memorable, trepidante, con seis goles, alternativas y emociones hasta el último suspiro. Una tarde de fútbol grande en Motril.