Se da por estabilizado el incendio de Cádiar
Foto de Infoca
Motril@Digital.- Esta tarde, poco después de las tres, el silencio de las montañas en Cádiar se rompió con el primer aviso: un incendio había comenzado a escalar por una ladera cerca de la pedanía de Yátor, en plena Alpujarra granadina. El calor era abrasador y el viento empezaba a soplar con fuerza. Todo lo que podía salir mal, salió mal.
En cuestión de minutos, el cielo se llenó de ruido. Dos helicópteros —uno pesado, otro semipesado— sobrevolaban la zona mientras aviones de carga en tierra se turnaban para descargar agua sobre un terreno seco, empinado y cubierto de matorral. Desde tierra, los bomberos forestales llegaban con rapidez, junto a dos brigadas BRICA, técnicos, agentes de medio ambiente y dos autobombas. Una escena que, por desgracia, ya nos resulta demasiado familiar.
Según información vertida por Infoca, el incendio se ha logrado estabilizar ya entrada la noche.
A estas alturas aún no se sabe qué lo ha provocado, pero con temperaturas rozando los 40 grados, vegetación extremadamente seca y ráfagas de viento impredecibles, cualquier chispa puede convertirse en un desastre.
Este incendio, además, ha coincidido con otro declarado poco antes en la circunvalación de Granada, junto a la rotonda de Recogidas, que pudo ser controlado con rapidez. Pero juntos nos recuerdan que agosto no da tregua y que el riesgo de incendios está en su punto más alto.
Desde los servicios de emergencia insisten: precaución máxima. Nada de barbacoas, nada de trabajos agrícolas con maquinaria que pueda generar chispas, y, sobre todo, ojos bien abiertos. En estos días, un simple descuido puede terminar en tragedia.