El majestuoso velero Royal Clipper atraca en Motril coincidiendo con el 20º aniversario del puerto
Reportaje Paulino Martínez Moré
Motril. El Puerto de Motril ha recibido la visita del emblemático crucero Royal Clipper, uno de los buques más representativos que recalan cada temporada en sus instalaciones. Coincidiendo con la celebración del 20 aniversario de la creación de la Autoridad Portuaria de Motril, diversas autoridades locales han visitado el velero para poner en valor la importancia del turismo de cruceros en la comarca.
Durante la recepción oficial, representantes institucionales y portuarios destacaron el papel del Puerto de Motril como motor económico y punto estratégico en las rutas del Mediterráneo. Asimismo, subrayaron la estrecha relación que el Royal Clipper mantiene con Motril, al que regresa año tras año consolidando su vínculo con el destino y contribuyendo a la proyección internacional de la Costa Tropical. Tal es así, que esta ha sido la escala número 24 y la 62 de la compañía naviera Star Clipper Mónac
El presidente de la Autoridad Portuaria de Motril, José García Fuentes, expresó su satisfacción por esta nueva escala del Royal Clipper en un año especialmente significativo: “Celebrar nuestro vigésimo aniversario con la visita de un buque tan emblemático refuerza nuestra apuesta por el turismo sostenible y de calidad y reconoce el esfuerzo conjunto de todos los que contribuyen al crecimiento del puerto y de la ciudad.”
“El Ayuntamiento de Motril está trabajando estrechamente con el puerto para fomentar la llegada de cruceros, no solo colaborando en el presupuesto de las lanzaderas gratuitas sino poniendo en marcha la ruta del azúcar y abriendo la fábrica del Pilar a los cruceristas”, ha destacado la alcaldesa, Luisa García Chamorro, quien también ha subrayado el esfuerzo económico que está haciendo la Diputación Provincial, organizando actividades específicas para promocionar el centro comercial de Motril.
Para la teniente de alcalde de Promoción Turística del Ayuntamiento de Motril, Mari Ángeles Escámez, “es muy importante para nosotros este tipo de cruceros porque nos consolida como destino. Queremos que comprueben las bondades y la amabilidad de nuestra ciudad para que quieran volver”.
El presidente de la Autoridad Portuaria ha recordado que “el Royal Clipper es el símbolo de un turismo de calidad que hay que cuidar porque, según confirman los datos, en torno al 70% de los cruceristas se quedan en la ciudad de Motril, gracias al trabajo conjunto entre el Ayuntamiento de la ciudad y el puerto”, ha recordado García Fuentes.
El Royal Clipper, considerado el velero de cinco mástiles más grande en servicio en el mundo, cuenta con capacidad para más de 200 pasajeros y combina la elegancia clásica de la navegación a vela con los servicios más modernos de un crucero de lujo. Su presencia en Motril refuerza el posicionamiento del puerto como destino preferente dentro de las rutas exclusivas del Mediterráneo.
El Puerto de Motril colocó una placa conmemorativa en el muelle Costa para el crucero Royal Clipper en 2017, en reconocimiento a la fidelidad de la compañía naviera Star Clipper con el puerto. La placa celebra la relación comercial y el compromiso de la naviera con la costa y la provincia de Granada.
El Royal Clipper es hoy uno de los iconos más impresionantes de la navegación moderna. Con cinco mástiles y 42 velas que suman más de 5.000 metros cuadrados de superficie vélica, combina la elegancia clásica de los grandes veleros del siglo XIX con el confort y la tecnología de un crucero contemporáneo. Construido en el año 2000 en los astilleros de Gdansk (Polonia) y completado en Países Bajos, pertenece a la compañía Star Clippers, especializada en cruceros de vela de lujo. Está inspirado en el mítico Preussen, un velero alemán de 1902, y con sus 134 metros de eslora y 4.425 toneladas de tonelaje bruto, mantiene el récord Guinness como el mayor velero de aparejo cuadrado en servicio activo.
El Royal Clipper puede albergar a 227 pasajeros, atendidos por una tripulación de 106 personas. Su clientela es principalmente europea y norteamericana, de entre 50 y 70 años, aunque también atrae a parejas jóvenes en busca de una experiencia distinta, romántica e íntima. Los viajeros no buscan casinos ni espectáculos masivos, sino el placer de navegar impulsados por el viento, subir a los mástiles, relajarse en la cubierta de madera o zambullirse directamente al mar desde la plataforma abatible de popa.
Sus itinerarios varían según la temporada: en primavera y verano recorre el Mediterráneo occidental, con escalas en Francia, España, Italia y las islas Baleares; en otoño, conecta el sur de Europa con Portugal y Marruecos —pasando por Cartagena, Motril, Málaga o Cádiz— antes de cruzar el Atlántico hacia el Caribe, donde navega entre islas como Barbados, Santa Lucía o Antigua. Además, ofrece travesías de larga distancia conocidas como Grand Voyages, que combinan aventura con todas las comodidades modernas: camarotes elegantes, piscina, restaurante gourmet, spa y zonas de observación.
Aunque cuenta con motores auxiliares, navega la mayor parte del tiempo solo con el viento, gestionado mediante sistemas automatizados que facilitan el izado y arriado de velas. Su silueta, inconfundible en cualquier puerto, evoca la época dorada de la vela, mientras que su interior refleja la sofisticación de un hotel flotante de cinco estrellas.
El Royal Clipper demuestra que la navegación a vela no pertenece al pasado: es un homenaje al mar y al viento, una experiencia de lujo, historia y aventura para quienes aún sueñan con viajar al ritmo de las olas. La visita a Motril, en este aniversario del puerto, subraya la relevancia de este coloso del mar para la navegación de lujo y el turismo marítimo internacional.

