Granada: Sílvia Pérez Cruz y Salvador Sobral deslumbran en un recital inolvidable en el Palacio de Congresos
Sílvia Pérez Cruz y Salvador Sobral: delicadeza, humor y amistad en 1001 Músicas – CaixaBank
- El Palacio de Congresos de Granada acogió anoche un recital inolvidable en el que la complicidad entre ambos artistas se convirtió en el auténtico hilo conductor de la velada
Granada, 12 de septiembre. La quinta edición del ciclo 1001 Músicas – CaixaBank vivió este jueves 11 de septiembre uno de sus capítulos más memorables. El Palacio de Congresos de Granada se transformó en el salón acogedor de una casa —con lámparas, alfombras y una escenografía cercana— para recibir el encuentro artístico entre Sílvia Pérez Cruz y Salvador Sobral, dos intérpretes singulares que ofrecieron al público una noche de sensibilidad, ingenio y complicidad.
El programa, planteado como un diálogo íntimo en constante movimiento, combinó creaciones propias con versiones cargadas de historia y emoción. Iniciaron la actuación con Ben poca cosa tens y El corazón por delante, fruto de la colaboración con Jorge Drexler, y continuaron con piezas como Hoje já não é tarde, L’amour reprend ses droits, Someone to sing me to sleep y Maruta no choro, que fueron tejiendo un recorrido musical sin fronteras.
Uno de los instantes más conmovedores llegó con Pequeño vals vienés. La canción hunde sus raíces en el poema de Federico García Lorca, convertido en Take This Waltz por Leonard Cohen e incorporado después en su álbum I’m Your Man (1988) y que Enrique Morente llevó aún más lejos con una versión flamenca junto a Lagartija Nick en Omega, uniendo el texto de Lorca con la música de Cohen en un ejemplo único de ida y vuelta cultural. En Granada, tierra natal del poeta, esta interpretación adquirió una dimensión simbólica y emotiva que entrelazó tradición, memoria y presente.
El itinerario prosiguió con Este presente, Mudando os ventos y Muerte Chiquita, donde la voz colectiva del público se convirtió en parte esencial. Ya en los bises, brillaron Mañana y un sorprendente desenlace con Estragar-me os, en cuyo preludio Sobral sacó a relucir su lado más teatral al dirigirse a la audiencia con un monólogo en inglés, en el que buscaba a una supuesta amante llamada Angela.
La cita destacó además por la riqueza instrumental y la frescura interpretativa. Sílvia alternó entre la guitarra acústica y un tambor en diferentes momentos; Sobral sorprendió tocando el acordeón; y a ello se sumaron sus músicos habituales, Marta Roma (violonchelo), Sebastià Gris (guitarra, banjo y mandolina) y Darío Barroso (guitarra), configurando un entramado sonoro lleno de matices. La variedad de registros y ritmos, así como el juego de idiomas —portugués, catalán, castellano, francés e inglés— dotaron al espectáculo de una textura única, siempre al servicio de la emoción.
Lejos de solemnidades, ambos intérpretes se mostraron cercanos, espontáneos y con un humor contagioso, arrancando sonrisas y aplausos. Sus guiños al público y al patrimonio cultural de Granada reforzaron una atmósfera de conexión que convirtió cada tema en una celebración compartida.
Al finalizar, la ovación fue unánime. Lo que quedó en el aire no fue solo la belleza de las canciones, sino la certeza de haber asistido a un encuentro donde la amistad y la honestidad artística fueron la verdadera esencia.
El ciclo 1001 Músicas – CaixaBank 2025, organizado por Proexa, cuenta con el respaldo de CaixaBank, Ayuntamiento de Granada, Cervezas Alhambra, Royal Bliss, Ideal, Mondo Sonoro, doctortrece comunicación y Ticketmaster, además de la participación de CREA SGR.
Granada, ciudad de escenarios
La quinta edición de 1001 Músicas – CaixaBank continúa durante septiembre con tres nuevas citas que refuerzan a Granada como epicentro cultural y de la música en vivo. El viernes 19 de septiembre, la banda australiana The Cat Empire llenará de energía el escenario de Industrial Copera. El sábado 20 de septiembre, será el turno de Antonio Orozco en la Plaza de Toros de Granada. Y el ciclo se cerrará el viernes 26 de septiembre con la actuación de Ana Belén en el Palacio de Congresos.