Granada: La Cabalgata de Reyes bajo el agua. La lluvia se cierne sobre la noche más mágica en la capital y provincia
Fotos Ramón Martín (Motril Digital)
Granada capital afronta la primera semana de enero de 2026 con un tiempo invernal marcado por la estabilidad inicial y un progresivo aumento de la inestabilidad conforme se acerca la festividad de Reyes, una evolución que mantiene en vilo a organizadores y familias ante la tradicional salida de las cabalgatas.
Durante los primeros días de la semana, del 31 de diciembre al viernes 2 de enero, el tiempo será relativamente tranquilo en la capital. Predominarán los cielos poco nubosos o con intervalos de nubes, temperaturas frías a primera hora —con mínimas cercanas a los 2-4 grados— y máximas suaves para la época, en torno a los 14-16 ºC. Un escenario típico del invierno granadino, favorable para la actividad en la calle.
El cambio llegará a partir del fin de semana, cuando las previsiones apuntan a un aumento claro de la nubosidad y a la entrada de frentes que podrían dejar precipitaciones. El sábado ya se espera un ambiente más gris y fresco, antesala de un episodio más inestable.
La noche de Reyes, el domingo 5 de enero, se presenta como el momento más delicado desde el punto de vista meteorológico. A día de hoy, los modelos apuntan a una alta probabilidad de lluvia en Granada capital, especialmente durante la tarde y la noche, coincidiendo con el horario habitual de las cabalgatas. Aunque no se prevén temperaturas extremas —las máximas rondarían los 12-14 grados—, el frío y la posible presencia de lluvia podrían comprometer el normal desarrollo de los desfiles.
De confirmarse este escenario, las precipitaciones podrían poner en riesgo la salida de las cabalgatas de Reyes Magos, obligando al Ayuntamiento a valorar ajustes de horario, recorridos alternativos o incluso cambios de última hora, como ya ha ocurrido en años anteriores.
En definitiva, mientras los primeros días de enero transcurrirán sin grandes sobresaltos, la noche más mágica del año en Granada llega bajo la amenaza de la lluvia, con una previsión que invita a la prudencia y a estar muy pendientes de la evolución meteorológica en las horas previas.

