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UPTA denuncia una persecución fiscal contra autónomos y pequeños negocios por parte de la Agencia Tributaria

La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA España) ha denunciado públicamente la deriva que, a su juicio, está adoptando la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) en su relación con el colectivo de trabajadores autónomos y pequeñas empresas. Según la organización, estos están siendo sometidos a una presión fiscal “cada vez más asfixiante y desproporcionada”.

En los últimos meses, UPTA ha detectado un notable incremento en las reclamaciones relacionadas con deducciones fiscales, cuestionándose de forma sistemática conceptos que, hasta ahora, habían sido legalmente reconocidos durante años. Entre los más afectados se encuentran los gastos vinculados al uso de vehículos —incluso en actividades donde su deducibilidad está justificada y reconocida—, así como los relativos a manutención, al desarrollo de la actividad en el domicilio habitual y a los denominados gastos de difícil justificación, cuyo porcentaje deducible ha pasado del 7% al 5% sin que, según UPTA, se haya ofrecido una explicación técnica adecuada.

La organización denuncia también un agravio comparativo en el trato fiscal: mientras que autónomos y pequeñas sociedades —que representan más del 90% del tejido empresarial del país— son sometidos a un constante escrutinio, las grandes corporaciones y sociedades participadas operan con estructuras jurídicas que les permiten eludir este nivel de fiscalización.

Ante esta situación, UPTA exige a la AEAT un cambio inmediato de criterio, el respeto a los compromisos adquiridos y la implementación de una política fiscal equilibrada, que no convierta a los trabajadores autónomos en el chivo expiatorio de las deficiencias del sistema tributario. Asimismo, denuncia el incumplimiento por parte de la AEAT de múltiples acuerdos alcanzados en la mesa de trabajo con organizaciones de autónomos y sindicatos.

UPTA recuerda que siguen pendientes importantes reformas como la implementación de la facturación digital, la transposición de la Directiva Europea sobre el régimen especial de IVA para franquiciados, y la aplicación de criterios de simplificación fiscal para determinados sectores, compromisos que no han sido cumplidos.

Por todo ello, UPTA ha decidido suspender formalmente su participación en la mesa de trabajo con la Agencia Tributaria.

El presidente de UPTA, Eduardo Abad, ha señalado:

“Estamos ante una clara desproporción en el trato fiscal. Se persigue a quienes menos medios tienen, mientras se deja al margen a quienes más capacidad poseen para eludir sus responsabilidades. No vamos a seguir avalando con nuestra presencia unos espacios de diálogo en los que no se respeta ni uno solo de los acuerdos alcanzados”.

Y añade:

“El nivel de desconfianza que proyecta la AEAT hacia los autónomos es inaceptable. Nos tratan como si fuéramos sospechosos por defecto, cuando somos quienes sostenemos gran parte de la economía de este país con nuestro esfuerzo y compromiso”.