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Un proyecto de 225.000 euros ayuda a 52 jóvenes de Granada a encontrar trabajo con apoyo del SAE y el Banco de Alimentos

El programa “T-Acompañamos” forma parte de las 27 iniciativas integrales para jóvenes que desarrolla el SAE en la provincia, con una inversión global de 9,3 millones de euros

El delegado territorial de Empleo de la Junta de Andalucía en Granada y director provincial del Servicio Andaluz de Empleo (SAE), Javier Martín Cañizares, ha visitado hoy junto al presidente del Banco de Alimentos de Granada, Manuel Marchal, el proyecto integral que ambas entidades desarrollan para mejorar la empleabilidad de medio centenar de jóvenes de la capital granadina.

La iniciativa, denominada T-Acompañamos, ofrece orientación, asesoramiento personalizado, formación y talleres prácticos con el objetivo de facilitar el acceso de estos jóvenes al mercado laboral. Según ha explicado el delegado, este proyecto forma parte de los 27 programas integrales dirigidos a jóvenes que el SAE ha puesto en marcha en la provincia junto a distintas entidades especializadas, con una inversión global de 9,3 millones de euros.

Gracias a esta actuación de la Consejería de Empleo, un total de 2.072 jóvenes granadinos reciben acompañamiento y orientación adaptada a sus necesidades profesionales, contribuyendo a que su búsqueda de empleo sea más efectiva y enfocada. El programa, que comenzó a finales de 2024, tiene como finalidad promover la inserción laboral de jóvenes desempleados mediante itinerarios personalizados y acciones formativas ajustadas a las demandas del mercado laboral, con el compromiso de insertar al menos al 40% de los participantes.

En el caso del Banco de Alimentos de Granada, el proyecto atiende a 52 jóvenes y cuenta con un presupuesto de 225.000 euros y una duración de 18 meses. Según ha detallado Manuel Marchal, los participantes tienen entre 18 y 29 años, se encuentran en situación de desempleo y poseen una cualificación media o baja, con trayectorias personales y profesionales muy diversas.

“Se trata de un grupo muy heterogéneo, lo que nos ha obligado a realizar un esfuerzo adicional en orientación, refuerzo competencial y motivación para mejorar su empleabilidad”, ha destacado Marchal.

A lo largo del proyecto se han impartido seis acciones formativas en especialidades con alta demanda, tras una prospección del mercado laboral realizada por el servicio de inclusión sociolaboral de la ONG. Se han detectado más oportunidades de empleo en los sectores del comercio y la logística, por lo que la formación se ha adaptado a las necesidades reales de las empresas del entorno.

Entre las especialidades impartidas destaca la de dependiente de supermercado, centrada en el comercio minorista y el sector de la alimentación, que ha contado con la colaboración de la Fundación Covirán, a través de su Escuela de Comercio. Además, los jóvenes han recibido formación como operarios de almacén y en actividades logísticas.

La recualificación de los participantes se complementa con módulos de atención al cliente y técnicas de venta, así como con talleres de búsqueda de empleo e inteligencia artificial, donde los jóvenes aprenden herramientas y estrategias digitales para mejorar su empleabilidad y aprovechar las ventajas de las nuevas tecnologías.

Durante la visita, el delegado territorial y el presidente del Banco de Alimentos se reunieron con un grupo de jóvenes beneficiarios, con quienes compartieron impresiones sobre su experiencia y los avances logrados hasta el momento en su itinerario de inserción laboral.