Mueren dos trabajadores de Huétor Tájar en el derrumbe de un edificio en obras municipales en Alcalá de Guadaíra
Dos trabajadores han perdido la vida este miércoles tras el derrumbe del techo en la planta baja de la antigua Casa Ibarra, un edificio de propiedad municipal en Alcalá de Guadaíra donde el Ayuntamiento llevaba a cabo obras de refuerzo estructural. Las víctimas, vecinos de Huétor Tájar , formaban parte de la plantilla de la empresa contratada para ejecutar el proyecto.
El siniestro se produjo en torno a las 12:00 del mediodía. Según ha informado la alcaldesa, Ana Isabel Jiménez, los trabajadores se encontraban en el interior del inmueble cuando se produjo el colapso parcial del techo, que acabó sepultándolos. Un tercer operario, que logró salir ileso, fue quien dio la voz de alarma. Uno de los fallecidos era su tío.
Los bomberos desplazados al lugar rescataron los cuerpos sin vida de los dos operarios a lo largo de la tarde. La alcaldesa, visiblemente afectada, ha explicado que por el momento se desconocen las causas exactas del derrumbe y ha subrayado que será necesaria una investigación para determinar lo ocurrido. “Los trabajadores llevaban ya tiempo en la obra. Habrá que esclarecer qué ha pasado”, señaló Jiménez, quien ha decretado tres días de luto oficial en el municipio.
Mientras tanto, crece la consternación en el entorno laboral y familiar de las víctimas. Un compañero de los fallecidos ha asegurado a los medios que uno de ellos ya había advertido días atrás del mal estado del edificio. “Me dijo que era un edificio viejo y que había que tener mucho cuidado, que hacía falta apuntalar”, ha relatado, visiblemente afectado.
El accidente ha provocado una oleada de reacciones de pesar y solidaridad. Familiares de los fallecidos se han desplazado ya hasta Alcalá de Guadaíra. Las autoridades locales y autonómicas han expresado sus condolencias y han pedido prudencia hasta que se esclarezcan los hechos. El siniestro vuelve a poner el foco sobre la seguridad laboral en el ámbito de la construcción y la necesidad de extremar las precauciones en intervenciones sobre inmuebles antiguos.