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Confirmada la presencia del avispón asiático en la Costa de Granada: una amenaza creciente para la biodiversidad andaluza

Fotos Socorro Correa

Socorro Correa (Motril@Digital).– La expansión del avispón asiático (Vespa velutina) continúa avanzando en Andalucía. Esta vez, ha sido avistado por primera vez en la Costa de Granada, una zona donde hasta ahora no se tenía constancia de su presencia. El hallazgo lo ha realizado un vecino de Lobres, quien logró capturar un ejemplar y fotografiarlo, lo que confirma su llegada a esta parte del territorio andaluz.

La especie invasora, originaria del sudeste asiático, ya se había asentado en otras provincias andaluzas como Cádiz, Málaga y Sevilla. Sin embargo, su detección en la costa granadina evidencia que el proceso de expansión se mantiene activo y amenaza con extenderse aún más por la región.

El avispón asiático representa un serio problema tanto para el medio ambiente como para diversas actividades económicas. En el ámbito apícola, su presencia está asociada con importantes pérdidas en la producción de miel, ya que esta avispa es una depredadora de abejas. Además, su dieta incluye otros insectos polinizadores, lo que afecta negativamente la biodiversidad y la polinización de cultivos y plantas silvestres.

Más allá del daño ecológico, también hay una dimensión de riesgo para las personas. La picadura del avispón asiático puede resultar muy dolorosa e incluso provocar reacciones alérgicas graves en personas sensibles.

El avispón asiático se distingue fácilmente de su homólogo europeo por su coloración: cuerpo marrón oscuro, patas con puntas amarillas (tarsos), abdomen negro con una línea naranja-amarilla entre los dos primeros segmentos y un cuarto segmento también naranja-amarillo. Su tamaño oscila entre los 2 y 4 centímetros de longitud. Sus nidos, generalmente construidos en las copas de los árboles, son grandes y esféricos, y rara vez se encuentran en zonas urbanas o edificaciones.

Las autoridades recomiendan que, en caso de sospecha sobre la presencia de un nido, se contacte de inmediato con los bomberos o el SEPRONA, evitando cualquier intento de manipulación por parte de particulares.

Con esta nueva detección en Granada, se reavivan las alertas sobre la necesidad de reforzar las medidas de vigilancia y control de esta especie invasora, que sigue avanzando silenciosamente por el sur de España y comprometiendo los equilibrios ecológicos locales.