Cinco meses sin rastro de Francisco Pérez Bedmar de Almuñécar
La tranquilidad de la localidad costera de Almuñécar, en la provincia de Granada, se ha visto alterada durante los últimos cinco meses por la desaparición de uno de sus vecinos más queridos, Francisco Pérez Bedmar. A sus 80 años, Francisco, un anciano conocido por su amabilidad y su costumbre de pasear por las calles de la localidad, desapareció sin dejar rastro el pasado mes de marzo de 2024. Desde entonces, su familia y amigos han vivido una angustia creciente mientras siguen sin obtener respuestas sobre su paradero.
La desaparición: Un misterio sin resolver
Francisco fue visto por última vez cerca de su domicilio, en el barrio de San Miguel, un área conocida por su tranquilidad y por la cercanía de sus habitantes. Desde el primer momento, la desaparición fue considerada inusual, ya que Francisco era una persona con buena salud para su edad y con una rutina diaria bien establecida. La falta de pistas concretas ha dificultado enormemente las labores de búsqueda.
Un despliegue de búsqueda sin precedentes
La desaparición de Francisco movilizó rápidamente a su familia, amigos y vecinos, quienes organizaron numerosas batidas por toda Almuñécar y sus alrededores. La búsqueda se extendió por tierra, mar y aire, con el apoyo de las autoridades locales, fuerzas de seguridad, voluntarios y equipos especializados de rescate. Drones, perros de rastreo y unidades acuáticas se sumaron al esfuerzo, pero, a pesar de la exhaustividad de la operación, no se ha encontrado ninguna pista que indique el paradero de Francisco.
Las batidas se han centrado en zonas montañosas, playas y caminos rurales, pero también se han extendido a otras áreas de difícil acceso. La desesperación ha llevado a la familia a realizar incluso búsquedas nocturnas y a recorrer caminos poco transitados, con la esperanza de encontrar algún indicio que permita dar con Francisco.
La angustia de la familia y la comunidad
Cinco meses después de su desaparición, la familia de Francisco sigue luchando con la incertidumbre y la angustia. La falta de respuestas ha generado una gran preocupación en la comunidad de Almuñécar, donde Francisco es recordado con cariño y donde su ausencia se siente cada día. Su familia ha hecho un llamado constante a la colaboración ciudadana, solicitando cualquier información que pueda ser útil para localizarlo.